sábado, septiembre 09, 2006

Bueno, aca estoy de nuevo, como recién estrenada, con una poesía muy loca, porque es consonante...

Flores marchitas en la ventana
despliegan su brisa perfumada
su dulce sequedad desconectada
de este mundo crítico y formal.

Las encuentra una dulce muchacha
valiente y ante todo revelada
capaz de amar cualqueir cosa avejentada
cosas imposibles de aceptar.

Pero el mundo de otra forma trabaja
y una mano vieja y sudada
con una cureldad incomparada
de sus jovenes manos las arranca

y la niña llorando desamparada
ve con lágrimas por el suelo derramadas
como sus dulces flores avejentadas
al tacho de basura van a parar.

Mel